73. EL TIGRE CONVERTIDO EN UNA OBEDIENTE OVEJA

 

              El costo de votar por el menos malo.   

            

        Y no ha sido producto de la nanotecnología u otro avance de la ciencia, sino su fracasada y desmedida ambición -integrada a su ADN- de jugar en las ligas mayores y por creerse su cuento lo ha llevado al más estrepitoso fracaso arrastrando consigo a nuestra nación. Pretendiendo salvar su imagen se ha plegado a la agenda de la izquierda globalista, la que ha trapeado a pesar de todo con su persona y lo seguirá haciendo en el futuro. Bueno, la culpa no es tan solo del hombrecito, sino es la consecuencia de haber votado por el menos malo, olvidando la secuencia de su itinerario para lograr el poder, tapizada de oscuros manejos económicos, subterfugios y traiciones, donde obviamente gran parte del empresariado y de la élite política pensando tan solo en sus intereses hizo la vista gorda, y no pocos siguieron su ejemplo con las colusiones que han terminado por desprestigiar al gremio, por la culpa de unos pocos sinvergüenzas.

         

    Su última cuenta en el Congreso superó todas las expectativas por lo nefasto de sus principales anuncios, que terminaron con botar a la basura lo poco y nada que quedaba del programa que lo llevó a la presidencia con una mayoría que el mismo no esperaba. El camino a la perdición del sentido valórico de su programa que interpreta a la gran mayoría de los chilenos, se inició a poco andar con el reconocimiento de la ideología de género, una de las tantas banderas de lucha de la izquierda internacional, en especial del Partido Comunista, rematando en esta oportunidad con el mal llamado “matrimonio igualitario”, que sus impulsores prefieren llamar así y no derechamente el “matrimonio homosexual”, porque saben que es rechazado por la opinión pública.

          

    Pero lo más grave, insólito y despreciable es que lo haya ocultado a sus ministros del área política, a la coalición de gobierno y ni siquiera el jefe de sus asesores Cristian Larroulet haya tomado conocimiento. Al parecer, el ideólogo según la prensa, fue nada menos que Benjamín Salas Kantor, de un pasado conflictivo en la Cancillería en la época de Ampuero, el “niño maravilla” lo apodaban sus detractores; integrante del equipo de Larroulet, que pasó a ser uno de los hombres más cercanos del mandatario, quien revisaba sus notas, redactaba sus discursos  y tenía por costumbre al final del día visitar al presidente, para conversar sobre lo humano y lo divino.

      Se le sindica como el causante de la salida de Mañalich al encabezar un grupo de intervención en dicho ministerio; uno de los gestores y redactores del Protocolo del Uso de las Fuerzas; acompañó al presidente en vez del ministro del ramo o del subsecretario a la reunión del G20; participó de la reunión que tuvo el mandatario con José Miguel Vivanco de Human Rights Wash; estuvo presente en la reunión del ministro Larraín con la misión técnica de la Alta Comisionada de la ONU para los DD.HH.; fue uno de los gestores del viaje a Cúcuta;  de los pocos asesores que estuvieron presentes cuando el Presidente decidió llamar a un “Acuerdo por la paz y la nueva Constitución”, el 12 de noviembre, en que seguramente debió haber sido uno de los promotores; etc., etc. 

        Es así como este joven que fue preseleccionado para ser el personaje principal de la película “Machuca” y en su época universitaria formó parte del NAU, Nueva Acción Universitaria, de centro izquierda de la UC, fundado por Giorgio Jackson y presidida por largos años por Miguel Crispi, hoy diputado de la Revolución Democrática; promotor del aborto libre, del Apruebo y férreo defensor de los derechos de las minorías sexuales no podría estar ausente por su pedigree en el último desaguisado del mandatario -conocido hasta la fecha- a quien no solo la izquierda radical le ha tocado las orejas, sino las ha entregado ambas, viajando especialmente desde el extranjero para este propósito, como integrante del grupo de las “palomas” con otros jóvenes de similares ideas, pero que no forman parte de su equipo de asesoría política.

              Todo parece indicar que el señor Piñera es reacio a conversar estos temas con gente más contemporánea; y en el colmo de sus deslealtades se quiere sacar el pillo al afirmar que él preguntó a su esposa y a sus hijos quienes estarían de acuerdo. ¡Desde cuándo las políticas de Estado son tratadas con las personas más cercanas de su oficina y de su familia! En vez de recurrir a sus ministros, partidos que apoyan su gestión y a los asesores expresamente nominados para tal objeto.

          Piñera, no estás tratando ni con el banco de Talca, ni con Ricardo Claro y otros que quedaron en el camino; estás gobernando para todos los chilenos que te eligieron y confiaron en tu lealtad y criterio. Te has convertido en una marioneta del PC y de la izquierda que mueven los hilos a su entera voluntad y has doblado la cerviz como Clodoveo, pero en sentido inverso, has quemado lo que has adorado y hoy adoras lo que has quemado. Te podrás escapar de los tribunales internacionales, pero no del juicio de la historia que será lapidario.

 “Con afecto”

 Fernando Hormazábal Díaz

General de Brigada (R)

 

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