Dos casos emblemáticos
Entre las variadas y múltiples
características que forman parte del ADN del marxismo, la mentira y la calumnia
sientan sus lares en forma predominante, haciendo de estas un verdadero arte,
ante el cual caen subyugados ignorantes, ingenuos, fanáticos ideologizados y
los más desposeídos de bienes materiales.
En los últimos días se han
conocido dos episodios –lamentablemente sin la difusión ni el bombo y platillos
expresados en sus orígenes- por lo que es necesario su mayor difusión para
comprender en su verdadera dimensión la siniestra y espuria versión marxista.
El primero de ellos es conocido
como el caso Maureira, estudiante
de medicina de la UC que fue detenido por Carabineros durante los disturbios
del estallido delincuencial y sorprendido durante un saqueo a un supermercado.
Josué Maureira fue conducido a la 51 Comisaría de Carabineros de Pedro Aguirre
Cerda y luego quedó en prisión preventiva por el cargo de robo en lugar
deshabitado. El caso adquirió connotación y conmoción nacional con gran
parafernalia, porque el joven de condición homosexual acusó que había sufrido
torturas y violación con una luma por parte del personal de la policía, además
de verlos inhalar cocaína y recibir amenazas de muerte; agregando que el
personal médico cuando fue conducido a constatar lesiones y ser estas negativas,
estaba coludido con la policía. Todos los medios se sumaron a la notición
difundida por el canal 24 hrs. rivalizando en los rating; y las cadenas
sociales hicieron su agosto desatando las penas del infierno para Carabineros
de Chile y obviamente, culpando a la dictadura de Pinochet.
Producto de lo anterior vinieron
las querellas: El Ministerio Público, el INDH, el Consejo de Defensa del
Estado, la Municipalidad Pedro Aguirre Cerda; el propio rector Sánchez de la UC
ofreció los servicios de la Clínica Jurídica de su universidad, el mismo que dialogaba
con alumnas en las gradas exteriores mientras otras se sumaban a la violencia
destructiva; y finalmente el propio afectado. Los carabineros fueron acusados
de vejaciones sexuales, torturas y apremios ilegítimos tanto en el carro
policial como en la comisaría, siendo su orientación sexual la finalidad y el
objeto de los ataques. No faltaron los discursos moralizantes de jueces,
fiscales y abogados durante la presentación de los cargos . La fiscalía
pidió penas entre 3 y 7 años a los diferentes acusados. Eso es lo que hemos
conocido hasta la fecha. Felizmente, hoy se sabe la verdad aunque sin el calor y
la fuerza anterior, ya que no es noticia para los medios y en especial porque
hace justicia para la institución vilipendiada.
Maureira no ingresó al supermercado en demanda
de quien pedía auxilio, como el declaró. Fue detenido junto a tres personas. Un
hombre con antecedentes delictuales, su pareja y su suegra y todos conducidos en el mismo vehículo a la
Comisaría, en cuyo trayecto fue agredido por el otro individuo al pretender
sacarse los pantalones con gran escándalo, repitiéndose la misma escena en la
celda en la Comisaría, donde tuvo que intervenir carabineros en su ayuda.
Diversos videos obtenidos de cámaras de vigilancia comprueban que jamás hubo excesos
de fuerza, tortura o violación por parte de la policía; por el contrario, ponen
en evidencia la extrema violencia y agresividad del joven estudiante contra los
uniformados, reafirmado por las declaraciones del otro detenido y autor de la golpiza por
su desviada conducta homosexual.
Pero lo más grave de este asunto
es que 20 días antes del proceso y mientras Maureira gozaba de su libertad, este
individuo provocó un escándalo de proporciones en una tienda de Falabella en
Temuco, al serle rechazada una compra por falta de cupo
en su tarjeta, insultando y amenazando de muerte a la dependiente, lo que
motivara que se llamara a Carabineros, siendo detenido con iguales reacciones a
las que había cometido en la 51 comisaría de Pedro Aguirre Cerda; en su auxilio concurrieron su abuela y su madre que intentaron calmarlo y que pusiera fin a su conducta, lo
que se obtuvo una vez que fuera medicado por su madre. Esto llevó a la fiscalía
de Temuco a solicitar un informe médico, el que determinó que era inimputable
por sus facultades mentales perturbadas, en palabras simples sufre de locura.
Los antecedentes anteriores, sin
duda fueron conocidos por la fiscal de la 5ª. Fiscalía Sur de Santiago y sin
embargo, prosiguió en su ánimo de condenar a los carabineros; como asimismo, no
considerar los sumarios seguidos por la UC en agosto del 2020 contra el alumno Maureira por falsificación
de licencias y de recetas médica; a lo que suma la apropiación de fondos de
la facultad. Esto pone una vez más en evidencia la ideología reinante en el
Ministerio Público, haciendo de este organismo un ente poco confiable y de
evidente daño para la justicia y la democracia.
Y de los organismos públicos y
medios de comunicación que hicieron un carnaval de demandas y acusaciones contra
Carabineros, absoluto silencio, coronados por el reciente anuncio de las
cabezas del ministerio del Interior de la reforma a Carabineros y a la Policía
de Investigaciones.
Fernando Hormazábal Díaz
General de Brigada (R)
Segundo caso emblemático próximo
blog.
Si estimas de interés ruego
difundir.
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