viernes, 22 de septiembre de 2023

198. EL CONDE: CINE CLOACA

 


El par de hienas

            Un viejo refrán criollo afirma “que de tal palo a tal astilla” ─entre múltiples variantes─ que tienen relación con aquellas personas que imitan, adquieren o heredan ciertas características de sus padres, lo que pareciera que no es el caso del legado de Hernán Larraín Fernández, ex profesor universitario y Vice Director Académico de la UC por largos años, que después del asesinato de Jaime Guzmán se integró a la UDI, llegando a ser su presidente; luego en igual cargo en el Senado de la República y posteriormente ministro de Justicia y de DDHH de Piñera 2,  De rango abolengo y estirpe, al parecer varios de sus seis hijos no salieron rayados. En efecto, Pablo y Juan de Dios; y en menor grado Hernán, el mayor, que presidió Evópoli, como el resto no fueron hijos del rigor, no vivieron el nefasto periodo de la Unidad Popular y no creo que hayan sufrido las carencias y el régimen cuasi marxista a que nos conducía el “demócrata Allende”. Me imagino que dada su solvencia económica de niños y jóvenes estudiaron al igual que su padre en colegios privados de elite y luego en universidades, donde sin duda fueron absorbidos por las corrientes izquierdistas, fruto de la doctrina Gramsciana. El hecho es que la pareja antes nombrada ha tenido una destacada participación como cineastas a nivel internacional –hay que reconocerlo– pero, abiertamente teñida en contra del régimen militar que hizo posible a su familia disfrutar de sus beneficios.

                Su última producción “El Conde”, que Toribio en una pésima decisión el 18 de septiembre, en vez de contagiarse con el espíritu que reinaba en los medios con motivo de las celebraciones de las Fiestas Patrias, fruto de su curiosidad y a pesar de su vacilación se arriesgó y se unió a Netflix.

                El filme es una sátira grotesca, un burdo ataque a la persona de mi General Pinochet –a quien denomina Pinoché, apodado “El Conde” ─ a la Primera Dama y en general a toda su familia. No escatima esfuerzos en hacer de este episodio una vil y despreciable cinta. Lo sitúa como un vampiro en el siglo XVI, en plena revolución francesa, de la cual es partícipe de la nobleza, pero que llegado el momento de la decapitación del rey Luis XVI se confunde entre el populacho; y después de la misma suerte ocurrida a María Antonieta, roba su cabeza y parte con ella. Posteriormente en el siglo XX lo ubica en Chile, donde llegó al poder derrocando a Salvador Allende. No se inhibe para denostar a la señora Lucía con absoluto descaro –a quien vincula con el mayordomo– una mosca blanca de origen Ruso, llamado Fiodor Krassnoff, con un nivel de morbosidad que refleja todo el veneno del director y del productor. Por supuesto que el vampiro tampoco se escapa a las descalificaciones, a quien lo retrata como un proxeneta que no deja de beber sangre hasta su muerte, licuando los corazones obtenidos en sus acciones de caza. Presenta a sus hijos sin ningún respeto por su padre, ávidos de su muerte para disputarse la herencia cuyo monto y ubicación desconocen.

                Felizmente Toribio se durmió un buen rato hastiado y fastidiado, pues jamás habría esperado un nivel de tanta sevicia, de odiosidad y perversidad por los "ilustres" hijos del ex ministro de Justicia. Ni un comunista se habría referido ─lo que es mucho decir─ en la forma y fondo conque lo hicieron estos cineastas, cual hienas ávidas de saciar su hambre. A no dudar que todo el elenco que participó es de reconocida militancia o por lo menos de afinidad con la izquierda.

              Aparece en el escenario la monja Carmencita, la mejor exorcista contratada por los hijos en su calidad de contadora para conocer y ubicar el monto de la fortuna, con instrucciones sí, de la superior del Convento que si encontraba un documento al portador sería bien recibido. Pero Carmencita, fracasa en su intento de sacar el demonio es poseída y mordida por el vampiro, convirtiéndola en una especie semejante y que finalmente es decapitada en la guillotina por Krassnoff. Las escenas finales son la muerte de la señora Lucía por la espada del Vampiro, a quien en diversas escenas lo muestran ya de uniforme o con grotescos abrigos de pieles; igual fin termina con la vida del mayordomo en las manos de El Conde. En este basural de celuloide, no podía faltar la imagen de la célebre Dama de Hierro de Inglaterra, la ex Primer Ministro Margaret Thatcher, aludiendo al apoyo prestado por Chile a Argentina durante la guerra de Las Malvinas, y que ella retribuyó con declaraciones de apoyo cuando mi general retenido en Londres fue víctima del acoso del juez Garzón. Thatcher también fue vctima de estos asesinos de imagen, pues la presentan como una pobre campesina que fue mordida, violada y embarazada por un vampiro, dando a luz la criatura que no deseaba morir y que situó 250 años después en Chile. El film culmina con las imágenes de ambos y con la voz en off en inglés, que se supone que es de la narradora, Margaret Thatcher: Si quieres que algo sea dicho, pídelo a un hombre. Si quieres que algo sea hecho, pídelo a una mujer.

                A lo largo de esta negra comedia de terror, hecha y difundida para formar parte del extenso programa de descalificación hacia las fuerzas armnadas, que ha contribuido a desunir aún más a los chilenos, sus creadores omiten la figura de su padre y las expresiones que el ex senador dirigiera hace unos años a mi general Pinochet y que es oportuno citar algunas:

“Los pueblos, por lo general, son poco agradecidos con quienes colaboran en su desarrollo en vida de sus protagonistas. Más bien la crítica y la descalificación, cuando no la envidia, dan cuenta de nuestra pequeñez e incapacidad para tributar en forma oportuna un justo reconocimiento. La historia de Chile no sería la misma de no haber intervenido usted en momentos cruciales de nuestra evolución. No podemos olvidar el estado crítico, la ruina material y la descomposición moral en que se encontraba nuestra nación en 1973. La desesperanza cundía en todos los ámbitos y la ciudadanía, indefensa y desprotegida, se derrumbaba junto al fracaso de la institucionalidad vigente para impedir la destrucción de la chilenidad promovida por una ideología fundada en el odio y la lucha de clases”

                Parodiando a mi amigo Hernán Núñez que hoy cumple una injusta condena en Punta Peuco, concluyo: “Chile tiene demasiados gusanos para tan poca manzana”

Fernando Hormazábal Díaz

General de Brigada (R)

 

2 comentarios:

  1. Si nuestro deseo es lograr La Paz y la reconciliación en nuestro país debemos practicar el perdón de todos aquellos que incurrieron en errores por mandato practicando acciones lesivas contra aquellos que que también luchaban por otro tipo, de gobierno y en honor al tiempo transcurrido y la edad de los afectados por lo menos pasar sus últimos días en el seno de su hogar.

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  2. Gracias Toribio por el aviso de una película que por cierto no veré.
    Estos hijitos de papy son dignos herederos del ex-Ministro de Justicia del segundo gobierno de Piñera, que tal vez contagiado por la cobardía de éste, en un momento dado y sin que nadie se lo solicitara, pidió perdón por los excesos del Gobierno Militar (?!) El genial Checho Hirane calificaría su actitud como parte de "La Voltereta".

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237. ¡OH LA JUSTICIA MILITAR!

  Voces de papagayos             A ctualmente  Chile está invadido de papagayos, y no son los loros que han migrado en grandes cantidades ...