viernes, 11 de agosto de 2023

191. A PROPOSITO DE LA JUSTICIA Y LOS DDHH.

 


El arte de la desinformación

 

         Hay que reconocer que la izquierda en este ámbito nos da “cancha, tiro y lado”. Son verdaderos artistas y nosotros, niños de pecho; y la D.C. no lo hace mal, en especial, cayendo en el negativismo al no reconocer el apoyo inicial de Frei Montalva y Aylwin al golpe miliar. “El país no tiene más salida salvadora que la gobernación de la Junta...La guerra civil estaba preparada por los marxistas... Es alarmante que en Europa no se enteren de la realidad: Allende dejó la nación destruida... La gente en Europa no sabe lo que ha pasado, no sabe que Chile está destruido".

             Y es en este escenario en que las FF.AA. tuvieron que intervenir y lo hicieron conforme a su preparación y doctrina. Actuaron con firmeza y dureza. Que se cometieron atropello a los DD.HH, claro que sí. Eran ellos con su revolución marxista, cuyas atrocidades han estado presente en todos los países en que han intervenido (Checoslovaquia, Rusia, Alemania Oriental, Albania, Corea del Norte. Camboya, Ucrania, Cuba, Venezuela, Nicaragua, etc.,) o  nosotros. Pero estos excesos se cometieron por ambos lados dentro del contexto que en esos momentos se vivía; aun más, los muertos de las Fuerzas Armadas y de Orden, varios cientos, fueron producto mayoritariamente de atentados, ataques a mansalva o emboscadas, desactivación de bombas, no necesariamente en enfrentamientos. Hoy día, claro, hay hechos que no se debía haber cometidos, pero se dieron dentro del escenario que se vivió, para el cual no estábamos preparados, porque no es parte de nuestra formación el enfrentamiento entre hermanos. Desde hace más de 100 años se ha normado sobre la protección de los derechos humanos, existiendo al respecto una cuantiosa bibliografía emanada desde la Liga de las Naciones, ONU, OEA, Corte Internacional de Justicia, etc., declaraciones y tratados de los cuales Chile se ha hecho parte; sin embargo, pese a ello se siguen observando conductas lesivas, lo que no significa que se justifiquen. Pero los seres humanos no son creaturas perfectas, son sensibles a los acontecimientos que les rodean y a los escenarios que se viven, ni mucho menos formateados con inteligencia artificial.

            En Chile no existió una política de exterminación como en los países comunistas. Los militares no salieron un día con tales propósitos. Fueron los hechos y las circunstancias en respuesta a las situaciones a que se vieron enfrentados; los esfuerzos, agotamientos, fatigas y estrés a que estaban sometidos los que los hicieron incurrir excepcionalmente en tales conductas. La propaganda marxista ha hecho aparecer a nuestros soldados poseedores de un ADN que los impulsa a cometer los mayores atentados contra los DD.HH. De ser así, se habrían ya manifestado en todos estos años contra los jueces que han hecho de la prevaricación, el no respeto a la ley de amnistía vigente ni a la prescripción de los delitos, como la presunción de inocencia, la vulneración de la igualdad ante la ley y el sometimiento a un sistema procesal obsoleto, que solo se aplican a los miembros de las fuerzas armadas en retiro que tuvieron participar en los hechos que se investigan. Ministros y Cortes fuertemente ideologizados o buscando acceder a las mayores instancias del poder judicial han hecho escarnio de ellos después de 50 años. Hacen gárgara con los preceptos legales internacionales, omitiendo descaradamente que el artículo 7 del Estatuto de Roma, respecto a la irretroactividad expresa: Nadie será penalmente responsable de conformidad con el presente Estatuto por una conducta anterior a su entrada en vigor; y en Chile solo rige a partir del 18 de julio de 2009.

         A la fecha según un informe de Gendarmería no hay  un solo condenado por delitos de lesa humanidad, por cuanto los jueces se han cuidado de no dejar constancia de ello por reconocer que caerían en ilegalidad. De atribuirles a nuestros hombres tales conductas vendría al caso lo que un ex funcionario de gobierno recientemente habría expresado a una persona actualmente muy cuestionada: ¿Cuánto vale un colombiano? O bien, repetir los sucesos de 1985 en el Palacio de Justicia en Colombia y “otra cosa cantaría el gallo”. Sin embargo, tanto ellos como las instituciones han sido absolutamente respetuosos del Estado de Derecho. En todo caso no conviene abusar de la paciencia.

             Pero los críticos callan o niegan las conductas de los movimientos subversivos, los ataques con bombas, incluso en poblaciones de escasos recursos que hirieron y mataron a niños inocentes. Han olvidado el atentado ferroviario de Queronque con 48 muertos y más de 500 heridos, provocado por terroristas en el cual le habría cabido responsabilidad al padre de MEO. Según el  informe Rettig habrían sido 2.279 los fallecidos en los 17 años, una cifra bastante inferior al millón de muertos que preconizaba el comandante Pepe para materializar su revolución y la conquista del poder; y los que anunciaba el Che Guevara en las ONU con todo desparpajo. “Hemos fusilado y seguiremos fusilando.” El mismo informe señala que 2.115 personas fueron víctimas de las violaciones a los derechos humanos, que hoy día gracias a la suculentas indemnizaciones que ha otorgado el Estado con fondos de todos los chilenos ─que suman miles de miles de millones de pesos─ lo que ha despertado el apetito de los abogados defensores habría alcanzado por arte de magia los 10.000 casos. Basta que dos personas se pongan de acuerdo y digan que fueron torturados para entrar al sistema de beneficencia, con substanciosos réditos para los patrocinadores. 

            Nadie informa sobre los fallecidos de las FF.AA.; entre el 11 de septiembre de 1973 y diciembre de 1976 hubo 125 muertos, 200 heridos y 8 desaparecidos; y a diciembre de 1988 se suman 90 fallecidos y 224 heridos. El combate no fue contra novatos, lo que pasa es que fuimos más eficientes.

 

 

 

Fernando Hormazábal Díaz

General de Brigada (R)

 

1 comentario:

  1. Como siempre, no puedo estar más de acuerdo con el análisis de
    Toribio. La izquierda no sólo es mentirosa, sino también muy cobarde.
    Allende y sus partidarios nos anunciaban la toma del poder por las armas,
    pero cuando vino la respuestas de nuestras FF.AA., exigida por la inmensa
    mayoría del país, corrieron a asilarse a las Embajadas y a protestar por las
    violaciones a sus derechos humanos. Vergüenza debería darles!

    ResponderEliminar

237. ¡OH LA JUSTICIA MILITAR!

  Voces de papagayos             A ctualmente  Chile está invadido de papagayos, y no son los loros que han migrado en grandes cantidades ...